La catedral-basílica
La historia de la Catedral-Basílica de Nuestra Señora del Pilar de Zaragoza hunde sus raíces en la leyenda, en la historia según la cual la Virgen María se apareció en el año 40 ante el apóstol Santiago a orillas del Ebro y dejó tras su venida un pilar y la orden de erigir a su alrededor un templo en su honor. No existen pruebas documentales ni arqueológicas de esta edificación, pero el en siglo IX sí que se conoce la existencia de una pequeña iglesia advocada a la Virgen y frecuentada por una de las comunidades mozárabes de la ciudad.