Los gigantes de Zaragoza
Los 12 gigantes de la comparsa de Zaragoza están fabricados en fibra de vidrio y cuentan con un armazón de barras de aluminio. Cada uno de ellos pesa alrededor de 40 kilos. Don Quijote, que alcanza los 45 kilos, es el más pesado de todos. Estos gigantes desfilan emparejados de manera natural y, así, es fácil encontrar al rey junto a la reina, al duque junto a la duquesa o a Palafox junto a Agustina de Aragón.
El Rey y la Reina
El Rey. Tradicionalmente este gigante representó a Jaime I el Conquistador pero, coincidiendo con el 800 aniversario de la conquista de la ciudad, en 1918 se cambió por la figura de Alfonso I el Batallador.
La Reina. La Reina representa desde 1918 a Doña Urraca, mujer de Alfonso I. Anteriomente, la Reina era una de las mujeres de Jaime I, pero no se sabe con seguridad cuál de ellas.
El Duque y la Duquesa
El Duque. El duque de Villahermosa acogió en su casa a Don Quijote y a Sancho Panza cuando estos pasaron por Aragón; razón suficiente para ser inmortalizado como gigante en esta comparsa.
La Duquesa. La Duquesa es la esposa del duque, tan responsable como él del alojamiento de los famosos personajes literarios en su casa y, por tanto, digna merecedora de ser retratada en forma de gigante.
Don Quijote y Dulcinea
Don Quijote. Este personaje no necesita presentación, pues es reconocido por todos allá donde vaya. Como curiosidad, cabe decir que este gigante es el más pesado de toda la comparsa zaragozana.
Dulcinea. Es el amor idealizado de Don Quijote. Una campesina que, a ojos de su enamorado, se convierte en la máxima expresión del amor virtuoso, en toda una “emperatriz de La Mancha”.
El Chino y la Negra
El Chino. Este gigante vestido de mandarín representa a todo el continente asiático, así como a sus tradiciones y a su cultura milenaria. El Chino es el único superviviente de la comparsa que, allá por el siglo XIX, simbolizaba las diferentes partes del mundo.
La Negra. Si el Chino representa a Asia, la Negra hace lo propio con África, con sus pueblos, tradiciones, cultura e historia. Se dice que su figura es la de Sélica, protagonista de la ópera La africana, de Myerberr. Es sustituta del Moro, que hasta finales del siglo XIX fue el representante del pueblo africano.
El Bearnés y la Bearnesa
El Bearnés. Este gigante nace en 1964 y representa a Gastón de Bearn, noble francés que ayudó a Alfonso I en la reconquista de la ciudad y que fue nombrado señor de Zaragoza tras ella.
La Bearnesa. Mujer del Bearnés y pariente de reyes aragoneses. Su papel como gobernante fue fundamental mientras Gastón batallaba por estas tierras. Su presencia, junto a la de su esposo, representa la unión de los pueblos aragonés y bearnés.
José de Palafox y Agustina de Aragón
José de Palafox. Se trata del general que defendió la ciudad durante los sitios franceses de 1808 y 1809. Su gigante se crea en 2008, coincidiendo con el segundo centenario de los sitios de Zaragoza.
Agustina de Aragón. Este es otro personaje que no necesita presentación. La heroína del primer sitio que, cañón en mano, logró frenar el avance francés en la puerta del Portillo. Al igual que el de Palafox, su gigante se crea en 2008 para conmemorar los 200 años de los sitios de Zaragoza.