La ciudad de Caesaraugusta fue fundada en el año 14 a.C. sobre la íbera Salduie y obtuvo el privilegio de ostentar el nombre completo de su fundador. Administrativamente, quedo enmarcada en la provincia Terraconense. Su periodo de mayor apogeo sucedió durante los siglos I y II, cuando se realizaron importantes obras públicas. La Zaragoza romana perduró hasta el año 472, fecha en la que fue conquistada por el ejército visigodo.
En la actualidad, todavía pueden verse algunos interesantes restos de esta época.
Murallas romanas
Las murallas que rodeaban Caesaraugusta tenían una extensión de tres kilómetros, alcanzaban cerca de diez metros de altura y, en sus zonas de mayor grosor, ocupaban un ancho de hasta siete metros. A lo largo de todo su perímetro había más de cien torretas defensivas. En la actualidad se conservan dos tramos de estas antiguas murallas. El primero de ellos se encuentra en la calle Don Teobaldo, sosteniendo los muros del convento del Santo Sepulcro. El segundo y más interesante está junto a la plaza del Pilar y el puente de Santiago.
Calle Don Teobaldo s/n y Plaza César Augusto, 3.
Foro de Caesaraugusta
El foro era el centro de la vida en la ciudad, donde se desarrollaba toda la actividad social, política, administrativa y religiosa. Varios de los edificios más relevantes de Caesaraugusta se encontraban aquí. Actualmente, el Museo del Foro exhibe restos de algunos edificios públicos, cimentaciones, cloacas, canales y un considerable número de instrumentos de la vida cotidiana.
Plaza de la Seo, 2.
Puerto fluvial
Caesaraugusta contó con un importante puerto fluvial que contribuyó a que la ciudad alcanzase una posición preeminente en la redistribución de mercancías por todo el valle del Ebro y sus alrededores. Hoy en día pueden visitarse los restos de esta importante infraestructura en el Museo del Puerto Fluvial de Caesaraugusta.
Plaza San Bruno, 8.
Teatro romano
El gran teatro de Caesaraugusta funcionó activamente entre los siglos I y III de nuestra era. Contaba con 106 metros de diámetro y capacidad para unos 6000 espectadores, hecho que lo convertía en uno de los más grandes de Hispania. Gracias a unas prospecciones arqueológicas realizadas en 1973, los restos del teatro salieron nuevamente a la luz y hoy en día forman parte del Museo del Teatro de Caesaraugusta.
Calle San Jorge, 12.
Termas públicas
Estas termas comenzaron a construirse en el siglo I d.C. y se mantuvieron activas hasta bien entrada la cuarta centuria de nuestra era. De sus restos, expuestos en el Museo de las Termas de Caesaraugusta, destaca una gran piscina exterior, secciones de varias columnas que la flanqueaban y algunos objetos de uso cotidiano.
Calle San Juan y San Pedro, 7.
Cripta de Santa Engracia
En el solar que ocupa la actual Basílica de Santa Engracia hubo en el siglo IV una primitiva necrópolis cristiana cuyos restos pueden visitarse en la cripta del actual templo. Aquí se guardan dos sarcófagos en mármol que suponen un excelente ejemplo de arte paleocristiano. El primero de ellos, Receptio Animae, está fechado en el año 330. El segundo, que lleva por nombre Trilogía petrina, data de entre 340 y 350.
Calle Tomás Castellano, 1.
Estatua del emperador Augusto
Esta escultura elaborada en 1938 es una reproducción en bronce del famoso Augusto de Prima Porta, obra de autor desconocido realizada en el siglo I d.C. y conservada en los Museos Vaticanos de Roma. La razón de que esta reproducción se encuentre en Zaragoza hay que buscarla en la amistad entre la Italia de Mussolini y la España de Franco, ya que responde a un regalo que el dictador italiano realizó a la ciudad en 1941.
Plaza de César Augusto, s/n.